En Cromwell siempre buscamos aplicar prácticas circulares y reducir nuestras emisiones de carbono. Materiales como el hormigón, el acero y el vidrio son los que producen más emisiones de carbono y también son los que representan la mayor oportunidad para reducir nuestra huella de carbono. Es la razón por la que el vidrio bajo en carbono Low-Carbon Glass de AGC es la solución perfecta para nosotros y nuestra estrategia, por eso lo queríamos para el proyecto Nervesa 21.
Materiales bajos en carbono: una inversión inteligente
Los inversores y los propietarios de edificios cada vez se muestran más exigentes en cuanto al uso de materiales sostenibles en sus proyectos con el fin de reducir su huella ecológica. Asimismo, existen argumentos financieros para inversores y propietarios: los edificios sanos y ecológicamente racionales ofrecen alquileres y precios de venta más elevados, lo que a su vez amplía el potencial de aumento a largo plazo del valor de la inversión.
Nervesa 21 es nuestro primer gran proyecto de rehabilitación en Italia. Es nuestro punto de referencia para la oficina del futuro, un edificio innovador y tecnológicamente avanzado. El proyecto, que consta de dos torres interconectadas con un total de 10.000 m² de espacio de oficinas, presenta las mejores credenciales ESG (ambientales, sociales y de buen gobierno) y está situado en el vibrante y bullicioso distrito Porta Romana de Milán”.
Construir de forma sostenible: una estrategia del Grupo
“En Cromwell estamos comprometidos con la sostenibilidad, no solo mencionándola, sino adoptando medidas reales”. Continúa Francesca Nolli: “El Grupo Cromwell se ha comprometido a alcanzar un nivel neto igual a cero para las emisiones de alcance 1, 2 y 3 en todos los proyectos, incluyendo las emisiones de los residentes, para 2045. Evidentemente tenemos una importante huella de carbono en los alcances 1 y 2, pero el más importante es el alcance 3, por lo que estamos tratando de trabajar con quienes residen en el edificio para influir en su comportamiento con el fin de reducir su huella de carbono y poder ir de la mano hacia el objetivo de emisiones de carbono nulas”.
Marco Amosso explica cómo Lombardini 22 está acostumbrado a realizar diseños de edificios sostenibles: “Para nosotros es perfectamente normal, ya que contamos con equipos de sostenibilidad que trabajan con el diseño y el desarrollo. Todos nuestros equipos se centran en intentar alcanzar el mejor nivel de sostenibilidad. Sin embargo, no cabe duda de que es un proceso que comienza desde el concepto mismo inicial”.
“El edificio en sí es una construcción acristalada y teníamos que elegir el vidrio adecuado para lograr un buen nivel de transparencia y prestaciones. La ventaja del Low-Carbon Glass es que la calidad del vidrio en términos de estética, prestaciones y resistencia no cambia, por lo que no tienes que hacer concesiones. Es una elección fácil. Es su propio proceso de producción el que presenta una menor huella de carbono”. Amosso lo confirma: “Dentro de muy poco, la huella de carbono será el siguiente elemento que deberá comprobarse a la hora de seleccionar el material adecuado”.
“Parte de nuestro cometido era conseguir la mejor calificación LEED para el edificio propiamente dicho y la mejor calificación WELL para los posibles residentes”.
Nervesa 21 contará con las certificaciones WELL Platinum y LEED Gold. Estos niveles se consiguen gracias a las prácticas circulares aplicadas por el Grupo Cromwell para reducir sus emisiones de carbono. A este respecto, Francesca afirma: “Materiales como el hormigón, el acero y el vidrio son los que producen más emisiones de carbono y también los que representan la mayor oportunidad para reducir nuestra huella de carbono. Es la razón por la que el vidrio bajo en carbono Low-Carbon Glass de AGC es la solución perfecta para nosotros y nuestra estrategia, por eso lo queríamos para Nervesa 21”.
“Sabemos que los interesados buscan edificios ecológicos y quisiéramos ser el líder del mercado en ese espacio. Exploran el mercado y sabemos que eligen Nervesa porque tenemos las mejores credenciales en el ámbito ambiental, social y de buen gobierno (ESG)”.