Inspiración

El mundo que nos rodea está en rápida mutación: ciudades más inteligentes y ecológicas, conectividad avanzada y nuevos modelos de movilidad. Los grandes avances tecnológicos responden a la creciente demanda de ciudades inteligentes y de un estilo de vida sostenible y, en este contexto, el vidrio desempeña el papel que le corresponde.

Mirox 4Green+ es un espejo innovador ideal para aplicaciones retroiluminadas gracias a la pintura 100 % opaca que cubre su parte posterior. Ahora, por primera vez, también se fabrica con una capa protectora a base de agua, totalmente exenta de plomo, lo que permite la conservación del medio ambiente. En otras palabras, constituye una oportunidad real de ofrecer al mercado un producto único en su género.

Muchas industrias – la electrónica, la automotriz y, en menor medida, la construcción – requieren vidrios extradelgados y resistentes. Es para este tipo de aplicaciones que el Centro de I+D de AGC en Gosselies, Bélgica, desarrolló Falcon, un vidrio extradelgado y de gran resistencia con el nivel más alto de transmisión luminosa jamás alcanzado en Europa. El vidrio Falcon se fabrica en nuestra planta de Mol, Bélgica.

Los clientes de las tiendas y los visitantes de los museos conocen bien el problema: ¡los escaparates y las vitrinas no son tan transparentes como se piensa! La luz que se refleja en el vidrio tradicional del escaparate o vitrina resulta molesto y dificulta ver los artículos y objetos que se encuentran detrás del vidrio, lo que requiere la instalación de sistemas de iluminación especiales para compensar este fenómeno.

¿Desea vidrios de 9 m, 12 m, 16 m o más? Aun cuando el vidrio alguna vez se vio limitado a la medida convencional de 6 m x 3,21 m, hoy en día se baten continuamente récords en términos de longitud. Existe una gran demanda internacional de proyectos de alto perfil que buscan ofrecer vistas panorámicas amplias y sin la más mínima interrupción.

El Memorial Tomáš Baťa, diseñado por el destacado arquitecto Zlín F. L. Gahura y construido en 1933, es un punto culminante del funcionalismo de Zlín. Gravemente dañado durante el bombardeo de Zlín en 1944, el Memorial fue reconstruido y reutilizado en 1954 como Casa de las Artes, una sala de conciertos y galería. Décadas más tarde, el proyecto de renovación del Memorial y la restauración en su forma original comenzó en 2016. Finalmente, en 2019, el Memorial Tomáš Baťa fue reabierto al público. El interior presenta un modelo del avión Junkers en el que Tomáš Baťa conoció su trágico fin en 1932.